Ya se iniciaron los trabajos que con el objetivo de rescatar una parte importante del patrimonio cultural e histórico de los torreonenses habrán de cumplir con su objetivo en el transcurso de las siguientes semanas, para reponer las piezas escultóricas que en hechos ocurrido en diciembre del 2019 y en febrero del presente año fueron robadas de dos de las cuatro fuentes ornamentales de la Plaza de Armas de la ciudad.
El proceso incluirá labores de limpieza y conservación de las otras dos esculturas existentes en el importante paseo público ubicado en el corazón del Centro Histórico de Torreón.
Etas actividades se desarrollan con la participación de un equipo de especialistas que trabajan bajo la coordinación del reconocido escultor lagunero Álvaro Castaños, de acuerdo con lo informado por el director del Centro Histórico, Luis Reyes Castrellón.
Sobre la importancia de las esculturas que se van a intervenir y las que habrán de reponerse, el funcionario recordó que se trata de réplicas fieles en bronce de las originales que en el año de 1907 fueron donadas a la ciudad por parte de representantes de la comunidad alemana asentada en la región.
Fue a mediados de la década de los años ochenta cuando las réplicas realizadas por el escultor Vladimir Alvarado se colocaron sobre las fuentes ornamentales de la plaza, para representar a las originales que desde entonces quedaron resguardadas en el archivo histórico municipal Eduardo Guerra, protegidas así de posibles robos y hechos de vandalismo. Se trata de las piezas identificadas como El Heraldo, Los Querubines, El Tritón y La Sirena.
De acuerdo con Reyes Castrellón, se tiene previsto que la restitución de las piezas robadas y destruidas en años anteriores pueda concluir dentro de un plazo aproximado de dos meses, esto en conjunto con la rehabilitación de las cuatro fuentes de la Plaza de Armas, que actualmente están fuera de operación.