Ciudad de México.- Carmen Salinas apagó su luz ayer jueves por la noche luego de varias semanas hospitalizada por un derrame cerebral.
Ahora su familia, amigos, conocidos y personajes del medio artístico la recordarán por su gran legado y por sus múltiples anécdotas que vivió en su infancia.
Una de ellas ocurrió cuando tenía tan solo seis años y fue a dar a la cárcel tras una discusión en la vecindad en la que vivía con su mamá y hermanos en Torreón, Coahuila.
Carmen Salinas contó que pasaba mucho tiempo con con Doña Tere, Julia «Paleta» y la señora Consuelo, quienes bebían grandes cantidades de alcohol sin importar el día de la semana.
Carmelita narró que entraba a las casas de las mujeres para cantar y bailar y así ganarse unos cuantos pesos.https://www.instagram.com/p/COZqUGCjuEO/embed/captioned/?cr=1&v=12
El día que fue a dar a prisión
Salinas recordó en una entrevista el año pasado que, una tarde se encontraba con la señora Tere cuando el esposo de esta llegó reclamándole a gritos y golpes por una supuesta infidelidad.
Una de las vecinas llamó a la policía por el escándalo y cuando los uniformados llegaron subieron a la patrulla a todos los involucrados.
Aunque Carmen, de solo seis años, nada tenía que ver con el problema, doña Tere la hizo pasar como su hija y se la llevó con ella, con la excusa que no tenía con quien dejarla.https://www.instagram.com/p/CN4AxnVDSX2/embed/captioned/?cr=1&v=12
Ahí en la cárcel, doña Tere presumió que su hija sabía cantar y bailar y le pidió que mostrara su talento frente a las reclusas.
Sin esperarlo, comenzó a recibir dinero de todas y cada una de ellas hasta llenar una taza de café, que previamente le habían dado.
Horas más tarde y tras una larga búsqueda y preocupación, la mamá de Carmen Salinas llegó a la cárcel y tras hablar con el comandante de la policía local, Carmelita salió de la cárcel sin pagar fianza alguna.
Carmelita recibió un regaño por parte de su madre, recordó la actriz, y le entregó el dinero que le dieron en la prisión por cantar y bailar.