El mundo del cine está de luto tras la muerte de Diane Keaton a los 79 años, figura emblemática que marcó generaciones con su talento, su estilo y su humor.
Desde sus primeros papeles en la década de 1970, Keaton se consolidó como una actriz versátil y disruptiva, famosa por su colaboración con Woody Allen en películas como Annie Hall y por su rol como Kay Adams en la trilogía de El Padrino.
Ganadora del Oscar por Annie Hall, su carrera abarcó cine, teatro y televisión. Fue reconocida no solo por su actuación, sino también por su singular forma de vestir: sombreros, trajes masculinos y elegancia espontánea que desafiaban los estereotipos de estrella.
Colegas, críticos y admiradores han resaltado su autenticidad, su buen humor y su capacidad para interpretar personajes con humanidad y profundidad. Su legado dejará una huella imborrable en la historia del cine.